Durante la etapa donde se estaba debatiendo la Ley de Inversiones por Guillermo Lasso en la Asamblea Nacional, uno de los puntos que se iba a revisar era el futuro del fomento audiovisual en Ecuador. Teniendo apoyo de cineastas ecuatorianos y del propio presidente, el que se haya negado el proyecto de ley podría significar pocos estímulos para que el país tenga un puesto en este área.
Según la Ley de Atracción de Inversionistas, esto iba a permitir una mayor importancia al sector productivo y de distribución para contenido audiovisual en Ecuador. Estas actividades iban a ser parte del Sector Prioritario para la transformación digital y fomento a la inversión del país. Se crearía un CIA (Certificado de Inversión Audiovisual) que seria emitido por el SRI (Servicio de Rentas Internas) a favor de las productoras nacionales y extranjeras hasta por el 37 %, tanto de los costos, como de los gastos que incurran en el país en cuanto a servicios audiovisuales y logísticos que se necesiten. Esto se daría siempre que se encuentren soportados en comprobantes de venta válidos y con una previa suscripción del contrato de filmación celebrado con el Ministerio de Cultura. También se contaría con la importación de equipos y pagos de honorarios para los que presten sus servicios aquí, exonerando del impuesto de salida de divisas. A partir de estos puntos, se podría beneficiar tanto los artistas ecuatorianos como también sus relaciones internacionales.
La Copae (Corporación de Productores y Promotores Audiovisuales del Ecuador) fueron los que más apoyaron esta propuesta para ayudar al país a ser una potencia en el negocio. Directores desde Jorge Ulloa hasta Sebastian Cordero estuvieron en redes sociales hablando del proyecto con productores y críticos de cine, haciendo conocer a la ciudadanía sobre lo que implicaba el proyecto. Comentaron como Ecuador sería un foco de interés para la realización de producciones alrededor del mundo, creando lazos internacionales con productoras de otras partes. La competitividad con otros países de latinoamérica se tendría por ser un punto de filmación, incentivando las producciones nacionales y que distribuidoras extranjeras se interesen. Esto recalcó que el plan podría beneficiar al país en el área de empleos y economía, sin contar la influencia de la cultura ecuatoriana en el ámbito cinematográfico.
Actualmente el proyecto de Ley de Inversiones no fue aprobado y actualmente se lleva una investigación por acusaciones a la Asamblea Nacional, pero por ahora se puso en pausa este plan de fomento audiovisual. Aun con la posible cancelación de lo que se tenía previsto, se espera noticias sobre cómo el presidente y las productoras locales ayudarán a buscar nuevas formas a llevar estas ideas a realizar para que el Ecuador pueda tener un espacio en el negocio audiovisual.
Por: Fernando Mideros Báez